Puede que lleves mucho tiempo haciendo ejercicio y te preguntes cuál será el siguiente nivel. Sea como lleves tu viaje fitness es normal preguntarse si deberíamos o no hacer ejercicio todos los días. Y esto es lo que vamos a responder en el artículo.
Sí, no hay una respuesta completa o al menos precisa. Entrenar o no todos los días tiene que ver con tu estilo de entrenamiento, tu alimentación, el bienestar mental, los niveles de energía y motivación, y muchos más.
Ojo: antes de plantearnos esta pregunta, sí es vital llevar un tiempo haciendo ejercicio, pues si eres principiante, no tendrías por qué preguntarte esto. Basta con que inicies tu acondicionamiento físico de 3 a 4 veces por semana y te pongas más fuerte.
Vamos a esos “depende” de los que te hemos hablado:
Si estás pensando en entrenar todos los días, en primera instancia, tiene mucho que ver el tipo de rutina o estilo de entrenamiento. Por ejemplo, si te gusta hacer HIIT puedes realizarlo de unas 3 veces por semana, pero jamás todos los días. La razón es su intensidad y el estrés que genera al cuerpo.
Lo mejor, en todo caso, sería alternar el HIIT con un entrenamiento de fuerza o cardio de baja intensidad.
Por otro lado, si tus entrenamientos son de baja a moderada intensidad, o si te gusta mezclar diversos estilos de entrenamiento, sí podrías realizar uno cada día. Con mezcla de entrenamientos nos referimos a rutinas de fuerza, equilibrio y flexibilidad.
Si lo que quieres es desarrollar fuerza y músculo, recuerda que la ganancia muscular ocurre durante el tiempo de descanso y no del entrenamiento. Sí podrías entrenar de forma consecutiva, pero lo mejor es alternar entre los grupos musculares para darle tiempo a tu cuerpo a recuperarse. En conclusión, deberías descansar al menos un día por semana.
Si, por el contrario, estás realizando entrenamientos de fuerza de cuerpo completo, deberías descansar un día o alternarlo con actividades de baja o mediana intensidad como caminar, andar, manejar bicicleta o jugar con tu perro.
La duración también es una variable a tomar en cuenta si queremos ejercitarnos todos los días. Como ya sabemos, según la Organización Mundial de la Salud, deberíamos hacer ejercicio al menos 150 minutos a la semana de ejercicio de intensidad moderada o 75 minutos a la semana de actividad física aeróbica intensa.
Sin embargo, ¿cómo podemos entender esto? Si estamos realizando rutinas intensas de más de 30 minutos, es vital que haya días intermedios en los que bajemos la intensidad y estés activo de otra forma (caminata, bicicleta, etc.). También puedes establecer una rutina de pasos diarios.
Si eres de las que realiza entrenamientos más cortos, como de 15 a 20 minutos, solo deberías escuchar a tu cuerpo: si te sientes muy fatigado o experimentas muchos dolores musculares por más de dos días, podrías descansar un poco más. Siempre consulta con tu entrenador personal.
Para muchas personas, estar motivadas para ejercitarse es todo un desafío, mientras que para otras es vital hacerlo o su día no estaría completo.
Una forma de darte cuenta si estás motivado -más allá de las ganas- es preguntarte si entrenas porque te hace sentir bien y lo disfrutas o por no quedarte con la culpa.
Si entrenas a pesar del dolor, el cansancio o la irritabilidad, entonces deberías hacer una pausa, concentrarte en ti de otras maneras y no entrenar todos los días. Recuerda: no tienes que sentirte culpable si un día no haces ejercicio, lo importante es la constancia.
Aprende a escuchar tu cuerpo, ya que el sobre entrenamiento puede ser terrible para tu viaje fitness. Si un día no te sientes muy bien, inténtalo y si no puedes, descansa, sal a caminar, sal con tu mascota, mantente activo de otras formas. Y no te culpes.
Pero ojo: a muchas personas les ayuda bastante hacer ejercicio para enfrentarse a un día largo. O sea que sí, el ejercicio puede ayudarte a subir tu energía.
Entrenar cuando estamos menstruando puede ser algo difícil, pero si tienes un ciclo regular y no presentas dolores, pues está muy bien. Incluso el ejercicio ayuda a llevar un mejor ciclo menstrual.
Por otro lado, si tu ciclo cambia repentinamente o desaparece quizás está sobre entrenando.
Para rendir bien tienes que comer bien, no hay otro secreto. Por ello, si tienes mucha hambre y poca energía o no has tenido tiempo para alimentarte bien, lo mejor es que no entrenes pesados, sino que intentes caminar o practicar yoga.
Te dejamos un video de nuestro canal de Youtube Método Lázaro.
Me llamo Carlos Lázaro, soy entrenador personal personal y nutricionista profesional y mi objetivo es democratizar el conocimiento y ayudar a las máximas personas posibles a mejorar sus vidas y transformar sus cuerpos. Gracias.