¿Podemos hacer algo para prevenir el cáncer?
Cáncer, el diagnóstico que en el Siglo XXI a todos nos asusta.
La incidencia de esta enfermedad, actualmente, es un problema de gran magnitud a escala mundial.
La ciencia trabaja a marchas forzosas, pero da la sensación que a más sabemos más crece la incidencia.
Se trata de una enfermedad sistémica, de una complejidad elevada, que provoca en los enfermos y sus familiares pánico cuando se escucha la palabra en la consulta de un oncólogo.
Estamos viendo que pacientes tratados con equipos multidisciplinares, donde cuenten entre otros con un entrenador personal terapéutico y un nutricionista, tienen mejor pronostico.
Ya que un diagnostico precoz puede disminuir las complicaciones así como también rebajar la tasa de malnutrición que presentan estos pacientes.
Pues la verdad es que sí, os traemos los factores de riesgo que es conveniente mantenerlos alejados y presentar los factores protectores que nos ayudarán a mantener el cáncer lejos.
Además, en el caso de que nos llegue el diagnóstico, si nos hemos cuidado previamente y la enfermedad nos encuentra fuertes y con una alimentación equilibrada y variada se ha demostrado que el pronostico mejora mucho.
Fumar, da igual si un cigarrillo o un puro, además de poder causar cáncer, también puede impedir que el cuerpo pueda combatirlo.
Y es que las sustancias toxicas que componen el humo al fumar pueden debilitar nuestro sistema inmunitario. Lo cual le hace más difícil al cuerpo poder matar las células cancerosas y estas pueden seguir multiplicándose.
Por lo que mantener el tabaco alejado y también debemos evitar entornos con muchos humos de tabaco.
Pide ayuda a tu médico si es necesario para tratar de dejarlo.
La mejor tasa para consumir es 0,0. Y es que no hay una cantidad de consumo segura.
Y es que para que nuestro cuerpo pueda descomponer el alcohol se producen unas especies reactivas de oxígeno, es decir radicales libres.
Estas moléculas pueden dañar nuestro ADN, produciendo cambios genéticos que pueden ocasionar que la célula se convierta en cancerosa.
Ese color tostadito de las patatas fritas, la porción de carne bien sellada para que quede jugosa en el interior o la tostada de la mañana. Esto es una reacción de Maillard.
Esta reacción es un conjunto muy complejo de reacciones químicas que crean la producción de melanoidinas coloreadas y compuestos aromáticos muy apreciados en la cocina.
Pero, en este proceso químico en cierta intensidad se produce acrilamida, una sustancia que si la ingerimos en altas dosis actúa como factor de riesgo de cáncer.
Por lo que es conveniente limitar las carnes asadas, tostadas muy tostaditas o las patatas fritas entre otros.
Ahora que ya ha quedado claro las cosas que debemos mantener lejos, veamos lo que podemos hacer activamente para cuidar nuestra salud e intentar mantener lejos de nosotros el cáncer.
Se están diseñando estudios más fuertes que los realizados hasta ahora en este tema, pero pruebas experimentales sugieren que hay una relación entre la Vitamina D y el riesgo de padecer cáncer.
En estudios de células y tumores cancerosos realizados en ratones han encontrado que la Vitamina D podría hacer más lento o incluso impedir la formación de cáncer.
Por lo que exponerte de 10 a 15 minutos a la luz solar para activar la síntesis de la Vitamina D es una buena idea, teniendo en cuenta que además de esto lo que sí está demostrado es que esta vitamina liposoluble refuerza nuestro sistema inmune.
Se ha visto que el cuerpo reacciona al estrés liberando hormonas como la epinefrina y norepinefrina, además de evidenciar que puede causar diferentes problemas y debilitar el sistema inmunitario.
Por lo que una buena gestión del estrés con diferentes herramientas actuará como factor protector.
Cualquiera de estas tácticas te pueden ayudar:
Me llamo Carlos Lázaro, soy entrenador personal personal y nutricionista profesional y mi objetivo es democratizar el conocimiento y ayudar a las máximas personas posibles a mejorar sus vidas y transformar sus cuerpos. Gracias.